Así mejoré exponencialmente mi control financiero, por Rodrigo Álvarez

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En el principio de los tiempos, yo era un empleado que cobraba un sueldo, gastaba y todo era sencillo.

Pero no siempre es tan fácil.

Un día, casi sin querer, tuve que comenzar a facturar servicios y tuve que abrir una empresa. Pero la lógica seguía siendo igual: cobraba, iba a la cuenta, gastaba y registraba los gastos en un único sistema de registro. Sin darme cuenta, me estaba haciendo trampa.

Había gastos que tomaba como míos, pero que no lo eran, en especial los gastos directamente asociados a la empresa. Esto me quitaba visibilidad de los ingresos reales y de los costos que me implicaban tener la empresa.

Si a esto le agregamos el condimento de que facturaba con IVA que debía retornar, el caos comenzó a ser cada vez más grande y el costo administrativo de tener orden y claridad también aumentaba. Necesitaba una solución y la necesitaba urgentemente. De todos los caminos, el que mejor me ha funcionado hasta ahora fue hacer lo siguiente:

#1 Separar registros

Separé totalmente lo que es el control de las finanzas de la empresa con el de mi familia. Eso quiere decir que hay un registro de gastos de la empresa y un registro de gastos de la familia, en mi caso, cuentas separadas de registro de gastos en Z. Esto implica que si quiero sacar dinero de la empresa, por ejemplo un sueldo, tengo que hacer dos cosas: ir al registro de la empresa y decir que saco dinero por concepto de “retiro de rentabilidad” e ir a mi registro personal y agregar un ingreso por la misma suma. Claro, además esto lo relaciono con el punto número 2:

#2 Separación de cuentas

Tenía una cuenta de banco y era feliz. Es una cuenta normal que comenzó siendo una cuenta sueldo y evolucionó a una cuenta no sueldo (ya no soy empleado). Pero necesitaba abrir una cuenta para la empresa. Es increíble lo tedioso que puede ser ese proceso en los bancos locales.

A ver, entiendo que el proceso sea auditado por el BCU y todo eso, pero cada cosa que me pedían, si tenía una duda y preguntaba, me demoraban semanas en responder.

La sensación que me quedó es “No queremos abrirte la cuenta”. Era como si les estuviera pidiendo un favor, cuando lo que estaba haciendo era comprando un servicio. Me pasaba que cada vez que los oficiales de cuenta del banco me destrataban o no me respondían, los descartaba…rápidamente me fui quedando sin bancos. Mi razonamiento era que si no me daban bola ahora, más adelante cuando tuviera algún lío, menos bola me iban a dar.

Al final, terminé abriendo una cuenta corporativa en PREX, que funciona casi igual que un banco, puedo sacar dinero de PayPal y Payoneer y además me trataron divino, y no me cobran un costo fijo. A la hora de pedirme cosas, me pidieron todo lo mismo que el banco, pero le pusieron una onda genial. Ante dudas, me llamaban. En resumen, me trataron bien (este no es un correo patrocinado por Prex, aviso!). La única contra es que algunas instituciones te piden para pagar una cuenta de banco a nombre de la empresa y cuando les paso la cuenta de Prex, se marean.

#3 Definición de salario

Me autodefiní un salario que es un % de la facturación de la empresa. El resto es para la cuenta de ganancias de la empresa y para sus costos operativos. Eso es lo mismo que explico en el curso (gratis) de Finanzas sencillas para negocios exitosos.

Todo esto me permite tener un control de mis gastos familiares, de la salud de la empresa en términos financieros y me ayuda a apoyar la cabeza en la almohada y quedarme dormido con sensación de paz. De hecho, me ha tocado trabajar con personas que quizás no tienen empresa, pero tienen propiedades que rentan y viven de eso. Yo los aliento a que definan cada propiedad como una unidad de negocio independiente, para poder saber qué rentabilidad real les está generando. Quizás haya opciones mejores en el mercado.

¿Te parece complejo?
Peor es no tener visión de nuestra realidad financiera. Te lo puedo asegurar. Eso lleva a ser un zombie financiero, esos que corren atrás del dinero sin parar a pensar que están haciendo.

 

Rodrigo Álvarez está detrás de Neurona Financiera 
"Neurona Financiera nació de la necesidad de tomar el control de mi vida financiera y dejar de sufrir estrés por dinero. Hoy miles de personas son parte de esta comunidad y han mejorado su vida diseñando la manera en que desean vivir".
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